
Por la tarde, tendrá lugar una ceremonia, en presencia del presidente de la República Federal, Joachim Gauck, en la Frauenkirche, la iglesia luterana emblemática del 'renacimiento' de la ciudad. Reducida a escombros, esta joya del arte barroco reconstruida a semejanza de la original, con 8.400 piezas del edificio destruido, fue reinaugurada hace diez años.
Ocurridos entre el 13 y el 15 de febrero de 1945, los bombardeos aliados en Dresde se cobraron la vida de 25.000 personas, según las conclusiones publicadas en 2010 por una comisión de historiadores encargada de estudiar este controvertido episodio de la Segunda Guerra Mundial.
Durante años, la extrema derecha alemana ha tratado de instrumentalizar con fines propagandísticos el aniversario de esta tragedia, logrando reunir a hasta 6.000 neonazis en las calles de la ciudad. Pero estas concentraciones han decaído con el tiempo, gracias a un fuerte esfuerzo de movilización de los grupos pacifistas y antirracistas. El año pasado, los manifestantes apenas llegaron al medio millar y este año no hay ninguna manifestación convocada, a excepción de una cadena humana contra la extrema derecha.
La cantidad real de víctimas fue controvertida durante años, hasta que en 2004 se creó una comisión de expertos para determinar con exactitud el balance de estos bombardeos "estratégicos". Establecido el número más probable de muertos en 25.000, ciertos historiadores consideran que, en comparación con los objetivos militares que se pretendían conseguir, el ataque fue desproporcionado.
La capital de Sajonia fue bombardeada por la aviación británica y estadounidense durante 37 horas, en las que unos 3.600 aviones lanzaron 650.000 bombas incendiarias, convirtiendo la 'Florencia del Elba', conocida por su rico patrimonio cultural, en un campo de ruinas. Setenta años después del fin del conflicto bélico, la ciudad sigue siendo un símbolo del horror vivido por la población alemana durante la guerra.
Entre octubre de 2014 y enero de este año, Dresde ha sido escenario de manifestaciones racistas, antiislamistas y antirrefugiados, convocadas todas ellas por el movimiento PEGIDA, que llegó a sacar a la calle a 25.000 personas.
Paradójicamente, esta ciudad de postal de medio millón de habitantes situada a 200 kilómetros al sur de Berlín no tiene apenas población musulmana. El Estado de Sajonia cuenta con un 2,5% de extranjeros, la mayoría provenientes de Rusia y Europa del Este.
La alcaldesa de Dresde, la conservadora Helma Orosz, subrayó que la conmemoración de este viernes debe servir para mostrar al mundo los "verdaderos valores de la ciudad".
Fuente : https://es.noticias.yahoo.com/alemania- ... 07861.html