Bureau central de renseignements et d'action / Bureau Central de Información y de Acción
Las relaciones entre los franceses libres asilados en Gran Bretaña, liderados por De Gaulle, y los servicios de inteligencia británicos, nunca fueron buenas, como no lo fueron las relaciones directas entre el líder francés y el gobierno británico.
Se podía decir "que se masticaban, pero no se tragaban" y todo no pasaba de meros formalismos, de los cuales dicho sea de paso, también recelaban.
Los británicos trataban con mucho desdén a De Gaulle, exigiéndole el máximo de colaboración, pero a la vez ignorándolo.
Por ejemplo, muchas veces, cuando los británicos realizaban acciones involucrando a Francia de algún modo, procedían sin tomar en cuenta la opinión del general o siquiera informándole antes de iniciar las operaciones.
La Sección Francesa del "Special Operations Executive" (SOE), organismo británico independiente para ejecutar operaciones subversivas, dirigido por Maurice Buckmaster, envió sus agentes a Francia sin advertir a los "franceses libres" de Londres.
El 5 de mayo de 1941, Georges Begué fue también lanzado en paracaídas cerca de Chateauroux y más adelante se le unió Fierre de Vomécourt, aristócrata de Lorena, formado en Inglaterra, que le ayudó a montar una importante organización de resistencia en el valle del Loira.
Este tipo de acciones dio lugar a que empeoraran las relaciones entre los franceses libres y los servicios de inteligencia británicos.
Por su lado, el Deuxieme Bureau de las Fuerzas Francesas Libres envió diversos agentes a Francia para obtener informes, organizar golpes de mano, evasiones y sabotajes.
Esos trabajos fueron realizados por agentes como Gilbert Renaud (alias Raymond o Remy), Duclos (alias Saint-Jacques), Fourcaud (alias Barbes) y Estienne d'Orves. En enero de 1941, pasando por Madrid, fueron enviados dos transmisores de radio a Raymond y a Saint-Jacques.
El agente Juliette (alias Guy), lanzado en paracaídas el 10 de mayo de 1941 también con un equipo transmisor, se encargó de inspeccionar y supervisar a las emisoras clandestinas.
En agosto, cuatro nuevos equipos de radio fueron lanzados en Francia y puestos en servicio por operadores entrenados por Guy.
Pero las redes de Saint-Jacques y de Estienne d'Orves fueron detectadas por los alemanes y desarticuladas en pocas semanas con la captura de todos sus integrantes.
Sin embargo, toda esa actividad bastante desordenada dio resultados que beneficiarían a los Aliados, entre ellos el de lograr la ubicación exacta de las instalaciones de las defensas costeras y los efectivos alemanes apostados a lo largo del litoral francés occidental.
Esa información fue vital para la ejecución de la Operación Overlord durante el Día-D.
Mientras tanto, los ingleses exigían que se les comunicasen todos los informes recogidos y los franceses, se hacían de rogar.
La animadversión era evidente y las relaciones continuaban deteriorándose.
El 10 de octubre de 1941, un compromiso permitió finalmente a DeGaulle crear el "Bureau central de renseignements et d'action" (BCRA) o Bureau Central de Información y de Acción, dirigido por André Dewavrin (alias Coronel Passy), quien manteniéndose "coordinado" (más bien subordinado) al SIS y al SOE, pudo realizar ciertas acciones independientes, sobre todo en materia de informes políticos.
Pero durante todo el año de 1942, siguieron llegando a Londres informes contradictorios y repetidos que causaban confusión.
Los franceses libres y la BCRA tratan entonces de resolver el problema de la multiplicidad de comunicados, muchas veces incongruentes, estableciendo un filtraje en el propio territorio francés.
En abril de 1943, se crea una central entre las redes principales.
Sin embargo, como algunos autores franceses mencionan en sus libros, la traición causaba estragos en el seno de muchas de esas organizaciones.
Por ejemplo, la "Cofradía Notre-Dame", perjudicada ya por la captura de Henri Boris, jefe de la subred "Reloj" ocurrida el 11 de noviembre de 1942, y después por la del jefe de la central de radio, Oliver Courtaud, en junio de 1943, dio como resultado que su suplente Robert Bracque aceptara, en noviembre de 1943, continuar las emisiones bajo control alemán y de paso fue diezmada por una serie de detenciones.
Igualmente, la introducción de un agente de la Gestapo, llamado Masuy, en el movimiento "Ceux de la Liberation Vengeance", hizo caer en una trampa de la policía de seguridad alemana a numerosos miembros de la red "Turma".
Por si fuera poco, la red "Centurie", de la "Organisation Civile et Militaire" (OCM), fundada por Alfred Touny en abril de 1942, tampoco escapó al desastre: Touny fue muerto junto a otros 12 de sus miembros en Arras.
De todas esas subredes, sólo pudo eludir la persecución de los policías alemanes "Cohors-Asturias", que pasó casi inadvertida por los agentes del contraespionaje alemán.
Todo el sistema de enlaces y transmisiones llegó a estar desarticulado y el BCRA se vio obligado a suspender todas las emisiones de radio, limitando las comunicaciones a los enlaces aéreos o marítimos, que eran muy infrecuentes e inseguros.
Después de dos años de trabajos, la BCRA culminó su labor cuando en París, el 27 de mayo de 1943, se reunieron los grupos de resistencia por primera vez.
El comité estuvo formado por miembros de la Resistance y de partidos políticos, bajo la presidencia de Georges Bidault.
Como resultado, fue fundado el "Conseil National de la Resistance" dirigido por el representante de De Gaulle, Jean Moulin.
Todos acordaron, en bien de la República Francesa luchar unidos por la victoria y la fundación de un gobierno democrático al momento de la liberación.
Fue igualmente constituida "l'Armée Secrete" bajo el mando del General Delestraint (alias Général Vidal).
Los agentes franceses tuvieron que renunciar a la centralización de las transmisiones, que fue sustituida por la regionalización, considerada como menos peligrosa.
Las redes recuperaron así su autonomía y en marzo de 1944 se establecieron células regionales, cada vez más independientes entre sí.
Como efecto colateral, el General DeGaulle se consolidó como líder absoluto de los franceses.