La Derrota Evadida

Hipótesis, especulaciones e historia alternativa

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La Derrota Evadida

Mensaje por SMEK »

“A pesar de la ayuda logística al ejército rojo, y de la apertura de nuevos frentes, Alemania estuvo, hasta Julio de 1943, ganando la guerra en el este. De no haber habido jamás ayuda logística al ejército rojo, ni apertura de nuevos frentes, Alemania habría ganado la guerra en el este”
FERNANDO NAVARRO ROBUSCHI

LA DERROTA EVADIDA

Cómo la URSS sobrevivió gracias a la ayuda logística y geo-estratégica de sus aliados.
Pretendo demostrar en este ensayo que, sin la intervención de Estados Unidos en la guerra, Alemania habría vencido a la Unión Soviética, lo que habría conllevado, con el Reino Unido completamente solo, a una muy probable victoria alemana en la segunda guerra mundial. Por lo tanto, pretendo demostrar que su error más grave no fue invadir a la Unión Soviética, sino declarar la guerra a Estados Unidos mientras la Unión Soviética seguía en pie. En particular, pretendo demostrar lo siguiente:

1: Que la mala situación logística de Alemania en el frente oriental habría sido más que compensada por la propia deficiencia logística soviética. Qué ésta última fue históricamente neutralizada por el envío de material aliado.

2: Que, dependiendo del año y del recurso, Alemania duplicaba, triplicaba o cuadruplicaba la producción soviética de Carbón, Hierro, Acero y Aluminio, algo nefasto para la Unión Soviética, que estaba obligada a luchar en una guerra prolongada. La Unión Soviética, por su parte, duplicaba o triplicaba, dependiendo del año, la producción alemana de petróleo.

3: Que, hasta mediados de 1943, el ejército alemán en el este no hacía más que fortalecerse. Estaba más y mejor equipado que el de 1941. El número de las tropas se hallaba en su zenit, y su eficacia en comparación a la de los soviéticos, menor a la de años previos, seguía resultando evidente por el radio de bajas entre ambos bandos. Que es recién tras mayo de ese año que, ante la creciente división de recursos materiales y humanos, la wehrmacht comienza realmente a debilitarse en el este.

4: Que Alemania nunca sufrió (hasta mediados de 1944) de ningún déficit petrolífero. Su adquisición de petróleo superaba siempre su consumo, y por lo tanto sus reservas crecían año tras año y,

5: Que la ventaja numérica soviética no era sustentable a lo largo del tiempo. La población soviética duplicaba a la alemana, y su ejército duplicaba o triplicaba al alemán, pero ya en el primer año de la gran guerra patriótica habían perdido (por la ocupación alemana) el 40% de su población. Durante la guerra perdieron 4 veces más el número de soldados y, como la historia demostró, los alemanes eran plenamente capaces de sostener a lo largo del tiempo una tasa de intercambio muy favorable.

Empecemos por la tesis a la cual me adhiero de por qué fue posible derrotar a Alemania:

1: La URSS sobrevivió a la Operación Barbarroja por su temprana movilización económica para la guerra total (facilitada por tratarse de una economía planificada), por su enorme geografía, sus enormes recursos humanos y naturales y, por sobre todo, la fortaleza del estado, evidenciada en su voluntad de hierro de seguir luchando sin importar el número de bajas, derrotas y territorio perdido. Aunque secundario, el mal estado de sus caminos en combinación con el clima ciertamente favoreció a Rusia, pues causó un malestar crónico a la logística del eje. Todo lo anterior mencionado se vio decisivamente (y se enfatiza la palabra decisivamente) exacerbado por a) La ayuda material aliada, no vehicular o artillera, donde la URSS era autosuficiente, sino logística; y b) La muy tardía movilización económica para la guerra total por parte de Alemania.

2: Al haber sobrevivido a la guerra relámpago y forzar a Alemania a una prolongada, de desgaste, le dio tiempo a Gran Bretaña y Estados Unidos de abrir nuevos frentes en Marruecos, Italia y Francia. Téngase en cuenta, sin embargo, que fueron los inmensos recursos financieros, naturales y humanos de Estados Unidos, no los británicos, los que hicieron siquiera posible el intento de apertura de nuevos frentes. Considérese, además, que la razón por la que Estados Unidos entró en la guerra en Europa, fue que Alemania le declaró la guerra el 11 de Diciembre de 1941, creándose así un enemigo de forma gratuita, pues ni siquiera estaba obligado a ello a pesar del pacto tripartito entre Alemania, Italia y Japón. EE.UU., lo más probable, no hubiese entrado en la guerra por su cuenta.

3: Estos nuevos frentes, cuyo éxito fue posible porque la URSS mantenía atada al grueso de las fuerzas armadas alemanas en su frente, serían la ruina de Alemania al robarla de toda iniciativa estratégica de forma permanente, y salvarían a la propia URSS de una derrota eventual.

Por lo dicho en estos tres puntos, creo que la victoria en el teatro Europeo de la Segunda Guerra Mundial se logró gracias a la complementariedad entre las acciones de los aliados. Si esa complementariedad no hubiese existido (Ej: Si Estados Unidos no hubiese entrado en la guerra, o si Alemania jamás hubiera invadido a la Unión Soviética), probablemente Alemania habría triunfado en el conflicto. El error crucial de Alemania según esta tesis, por tanto, no fue invadir a la Unión Soviética, sino que fueron a) El no haber movilizado la economía para dicha invasión, ni siquiera en Enero de 1942, cuando ya era obvio que la guerra se alargaría, como mínimo, un año; y b) La declaración de guerra a los Estados Unidos en Diciembre de 1941 a pesar de no haber vencido aun a la Unión Soviética.

Aunque mencionados en orden cronológico, el segundo error tiene mucho mayor peso que el primero, pues con Estados Unidos en la guerra la movilización para la guerra total se volvía una absoluta necesidad, mientras que, si se mantenía fuera de la guerra, los propios problemas de la economía y logística soviética habrían compensado en gran medida el efecto negativo de una Alemania que luchaba como si no estuviera en una guerra mundial. Nada en un escenario hipotético es certero, pero como se demostrará en cifras y citas, de no haber entrado Estados Unidos a la guerra, Alemania habría, lo más probable, vencido a la Unión Soviética.

1ra Aclaración: Nótese que el presente artículo no pretende disminuir el rol de la URSS en la derrota de Alemania: El sólo hecho de haber sobrevivido a la Operación Barbarroja y seguir luchando son testamento de la tenacidad del ejército Rojo, de la fortaleza del estado y los éxitos productivos de la economía planificada. El ejército Rojo le causó el 80% de las bajas totales a la Wermacht. Adicionalmente, es impensable que, si la URSS no hubiere mantenido en su frente a la enorme mayoría del ejército alemán, las operaciones Husky (y la subsiguiente invasión a Italia) y Overlord hubieran tenido éxito. Una Wermacht a pleno potencial en occidente hubiese prevenido dichas invasiones sin importar la cantidad de años y recursos en ellas invertidos. Sin la presencia soviética en la Guerra Mundial, Alemania jamás habría sido derrotada. Mi tesis es precisamente que esa presencia decisiva soviética fue mantenida gracias a la ayuda material y geo-estratégica de sus aliados.

2da Aclaración: Este trabajo se sustenta, entre otras cosas, en la premisa de que la Operación Barbarroja no fue, en sí misma, un error, si bien no niega que múltiples errores se dieron en el aspecto operacional dentro de esa invasión (no atacar Moscú a fines de Agosto o inicios de Septiembre sino a inicios de Octubre; expandir la operación azul para incluir innecesariamente a Stalingrado; No bombardear a tiempo los yacimientos petrolíferos de Bakú para privar a los Soviéticos, siquiera de manera temporal, de su petróleo, etc.), así como errores diplomático-estratégicos cometidos alrededor de esa idea (no informar ni a Japón ni a Italia de su inminente invasión. Por culpa de esto, Italia cometió el error de invadir Grecia, de donde tuvo que ser rescatado por los Alemanes, retrasando así la invasión a la Unión Soviética 5 semanas que resultarían cruciales (como el propio Hitler reconoció en Febrero de 1945), además restándole casi medio millón de tropas a la propia invasión; asimismo, dado que no se informó ni invitó a Japón a formar parte de dicha invasión, se perdió una oportunidad clave de forzar a la URSS a luchar en 2 frentes simultáneos (Por supuesto, esto asumiendo que Japón se hubiera dejado convencer por Alemania de esta idea). Todos esos errores ya sea debilitaron a la invasión, retrasaron su inicio, o prolongaron el conflicto en sí mismo, lo que, como dicho anteriormente, dio tiempo a los aliados de abrir nuevos frentes. Pero dado que Alemania pudo vencer, la invasión en sí misma no debería considerarse un error.

Habiendo dejado eso en claro, empiezo a describir el escenario hipotético en el que me centro, en donde una de esas complementariedades entre los aliados que permitieron la victoria no existió: La entrada de los Estados Unidos en el conflicto Europeo.

1- La fecha es 22 de junio de 1941. Todo hasta esta fecha acontecido, aconteció.

1.a- Alemania por tanto incluye todas sus anexiones y conquistas hasta esa fecha (Austria, Checoslovaquia, Polonia Occidental, Dinamarca, Noruega, Luxemburgo, Holanda, Bélgica, Francia, Yugoslavia y Grecia), así como sus alianzas en este teatro de guerra (Italia, Hungría y Rumania), títeres (Eslovaquia) y co-beligerantes (Finlandia). Nótese que, aunque su aliada, Bulgaria jamás contribuyó a las fuerzas armadas que invadieron a la Unión Soviética, y por tanto no es tenida en cuenta.

1.b- La Unión Soviética por tanto incluye las recientemente proclamadas repúblicas de Lituania, Estonia, Letonia y Moldavia, sus 11 naciones ya previamente aliadas y sus anexiones de Polonia Oriental y el sector Finés de Karelia.

2- Estados Unidos nunca entrará en la guerra, pues Hitler no cometerá el error de declarársela. La ayuda material que brindará a los que hubieran sido sus aliados será entonces mínima en comparación a la histórica, pues su inmensa ayuda material dio comienzo tras entrar en el conflicto europeo. Otras consecuencias de su neutralidad son que, debido a su decisiva dependencia en los recursos norteamericanos, jamás será posible desarrollar la masiva campaña aérea sobre Alemania, así como tampoco la Batalla del Atlántico, ni los desembarcos en Marruecos, Sicilia, Naples y Normandía. Por ejemplo, de no haber recibido el 68% de los materiales del Préstamo y Arriendo, Gran Bretaña difícilmente hubiera podido expulsar a los alemanes en el Norte de África, y definitivamente no en una fecha tan temprana, y mucho menos habría tenido la capacidad de abrir otro frente en Europa.

3ra Aclaración: Es importante tener en cuenta que este trabajo basa su conclusión en un análisis únicamente numérico y porcentual: ¿Qué nación producía más recursos?, ¿Qué ejército era más eficaz basándose en el radio de bajas?, ¿Cuántas bajas sufrió cada bando en relación a su ventaja o desventaja numérica?, etc. NO toma en cuenta los azares de la guerra. Obviamente estoy consciente de que la posesión de más recursos naturales y humanos no garantizan una victoria, ni tampoco lo hace el tener un ejército más eficaz. Por tanto, este análisis NO afirma para nada la inevitabilidad de una derrota soviética, sino las mayores probabilidades que Alemania tenía de derrotar a la URSS, basándose en el tipo de preguntas antes hechas.

Empecemos por disipar un mito que concierne a un factor esencial para mantenerse en pie en una guerra prolongada, de desgaste, ¿Cuál es este factor?

LA LOGÍSTICA:

¿Cuál es el mito? Que la pesadilla logística de Barbarroja, pesadilla que fue muy real, le hacía imposible a Alemania derrotar a la Unión Soviética tras su fracaso ante Moscú en Diciembre de 1941. Una exageración insostenible. Pero empecemos por dar a esta teoría una parte de la razón: Es bien sabido que las fuerzas armadas alemanas sufrieron de problemas logísticos de manera crónica durante la mayor parte de la guerra contra la Unión Soviética. Esto se debió a las enormes distancias que había que recorrer, así como al mal estado de la mayoría de los caminos, así como a la incompatibilidad entre los rieles rusos y alemanes, así como a la enorme actividad partisana en las áreas ocupadas, el clima y su efecto sobre el terreno, y la completa subestimación del Ejército Rojo (que debía ser derrotado en 3 meses o menos, y que provocó que Alemania no almacenase suficientes suministros y recursos para una guerra prolongada, el ejemplo más nefasto y conocido siendo que no se almacenó ropa invernal, pues la Unión sería supuestamente derrotada mucho antes de la llegada del invierno).

La escasez de suministros y recursos por el malestar logístico y la no movilización para la guerra total son precisamente las razones de que las ofensivas alemanas en el frente oriental fueran cada vez más pequeñas en teatro operacional y número de tropas, a pesar de que, irónicamente, su ejército continuó fortaleciéndose hasta mediados de 1943. Esa escasez se pudo haber resuelto al movilizar tempranamente la economía para la guerra total. Idealmente esto habría empezado entre Septiembre de 1939, y a más tardar en Enero de 1942. De haber ocurrido esto, las ofensivas de los años siguientes no habrían disminuido en tamaño operacional. Sin embargo, a pesar de esas deficiencias en el bando del Eje, diré:

La logística de la Unión Soviética hubiera sufrido en este escenario un crónico malestar, pues fue históricamente dependiente de los envíos aliados de camiones, jeeps, vagones de tren, ferrocarriles, comida y combustible. Tan mala era su situación logística y económica tras 1941, que el propio Stalin reconoció en público y en privado que sin la ayuda material aliada (que fue predominantemente logística) la URSS habría perdido la guerra. Los soviéticos tenían la ventaja de no tener líneas de suministro tan extendidas como las alemanas, y de luchar en territorio amigo con una economía que fue movilizada para la guerra total desde el inicio, y por tanto con la producción masiva de muchos artículos esenciales para la misma, como artillería, tanques y aviones. Pero no debería en realidad sorprender el hecho de que sin la ayuda aliada la Unión Soviética habría estado herida de muerte, pues como la autora Susan Linz afirma, tras Barbarroja, Alemania ocupó o aisló el territorio soviético que estaba habitado por el 40% de toda la población soviética (es decir, unas 68 millones de personas), el 60% de su ganado, el 32% de su fuerza laboral, el 33% del capital fijo de su economía (fábricas, infraestructura industrial, maquinaria, etc.) y que producía casi el 40% del grano, y como mínimo el 60% de la producción total de carbón, hierro (lo cual implica la vital producción de acero) y aluminio (”The Impact of World War II on the Soviet Union”, p. 13.) El autor John Mosier da las siguientes cifras: el territorio ocupado albergaba el 25% de su producción de electricidad, y 2 tercios de su producción de carbón, hierro, acero y aluminio (”Hitler vs. Stalin: The Eastern Front 1941-1945”, p. 296-297) No es muy preciso argumentar que una nación pueda sufrir semejantes pérdidas, y concluir que pueda permanecer, ni mucho menos prevalecer, en una guerra, sin ayuda. Tras Barbarroja, menos de los primeros 6 meses de la gran guerra patriótica, es evidente que Alemania obtuvo la ventaja decisiva sobre el frente oriental y pasó a ser el “favorito” para ganar en el este, aun cuando su plan de una guerra corta fuera frustrado ante Moscú, y aun cuando Stalin aun tuviera suficiente espacio y suficientes recursos humanos y naturales para prolongar la guerra.

La ayuda material aliada a la URSS en cuanto a las armas esenciales de la guerra, como Tanques, Artillería y Aviones, fue bastante menor. Es acertado afirmar que la Unión era autosuficiente en la producción de estas armas. Pero no así en relación a lo logístico o en las materias primas para la producción de esas armas mencionadas: Estados Unidos envió un número de camiones y jeeps, su uso más evidente siendo el de transporte de tropas y suministros, que equivalían al 42% de la propia producción soviética. Según el historiador Boris Sokolov, al terminar la guerra, el 66% de transportes soviéticos en uso habían sido fabricados en el extranjero. También en el apartado logístico, más de la mitad de los rieles usados por la Unión provenían de envíos aliados. Proveyó también el 57% del combustible para aviación usado por la Unión. O, dicho de otra forma, sin el combustible aliado, más de la mitad de los aviones soviéticos no hubieran levantado vuelo. La comida enviada equivalía a un 25% de la producción doméstica. Proveyeron, como mínimo, un tercio de todos los explosivos usados por la Unión Soviética durante la guerra, así como el 55% del aluminio y más del 80% del cobre usados” (“Russia’s Life-Saver, Lend Lease Aid to the USSR in World War II”, p. 8-9).
Los siguientes testimonios dejan en claro lo expuesto arriba:

El General Georgy Zhukov afirmó en una entrevista confidencial realizada en 1963 con el corresponsal de guerra Konstantin Simonov:

“… Se dice hoy en día que no nos ayudaron. Pero no puede ser negado que los americanos nos dieron una inmensa cantidad de bienes, sin los cuales no hubiéramos podido formar nuestras reservas y continuar en la guerra… No teníamos explosivos ni pólvora. No teníamos nada con lo que cargar nuestros rifles. Los americanos realmente nos salvaron con su pólvora y explosivos. ¡Y cuántas planchas de acero nos dieron!, ¿Cómo habríamos producido nuestros tanques sin el acero americano?... Sin los camiones americanos no hubiéramos tenido nada con lo que empujar nuestra artillería…”

El historiador Boris Sokolov afirma lo siguiente:

“Para apreciar realmente el significado del Préstamo y Arriendo en relación a la victoria soviética, sólo hay que imaginarse cómo habría tenido que pelear la Unión Soviética sin esa ayuda. Sin el Préstamo y Arriendo, el Ejército Rojo no habría tenido un tercio de su munición, la mitad de sus aviones ni la mitad de sus tanques [debido a su dependencia del acero norteamericano]. Adicionalmente, habrían sufrido una constante escasez de transporte y combustible. Los ferrocarriles se habrían parado de forma periódica. Y las fuerzas soviéticas habrían estado mucho más descoordinadas con una constante falta de radios… habrían estado perpetuamente hambrientos sin la comida enlatada americana…” (“Russia’s Life-Saver: Lend –Lease Aid to the USSR in World War II”, p. 9)

En un ensayo que el mismo autor escribió para la red mediática RFE/RL, una red alternativa a la estatal rusa, dejó en claro que:

“En una hipotética batalla de uno contra uno entre la URSS y Alemania, sin la ayuda del Préstamo y Arriendo, y sin la distracción de fuerzas significantes de la Lufwaffe y la marina alemana y la distracción de más de un cuarto de sus fuerzas terrestres para la lucha contra Gran Bretaña y Estados Unidos, Stalin difícilmente habría vencido a Hitler… En general, es seguro concluir que, sin los suministros occidentales, la Unión Soviética no sólo no habría podido ganar la Gran Guerra Patriótica, sino que además no hubiese podido resistir la agresión alemana, pues no era capaz de producir la suficiente cantidad de armas y equipos de combate y proveerlos con gasolina y munición”

Tanto Stalin como Nikita Kruschev reconocieron que sin la ayuda material norteamericana, la URSS habría sido derrotada. En sus memorias, Kruschev escribió lo siguiente:

“Me gustaría expresar mi sincera opinión sobre las opiniones de Stalin acerca de si el Ejército Rojo y la Unión Soviética podrían haber hecho frente a la Alemania nazi y sobrevivido a la guerra sin la ayuda de los Estados Unidos y Gran Bretaña. Primero, me gustaría contar algunas observaciones que Stalin hizo y repitió varias veces cuando estábamos "conversando abiertamente". Declaró sin rodeos que, si los Estados Unidos no nos hubieran ayudado, no habríamos ganado la guerra. Si hubiéramos tenido que luchar contra la Alemania nazi uno contra uno, no podríamos haber resistido la presión de Alemania y habríamos perdido la guerra. Nadie discutió este tema oficialmente, y no creo que Stalin dejara ninguna evidencia escrita de su opinión, pero señalaré aquí que varias veces en conversaciones conmigo notó que esas eran las circunstancias reales. Nunca quiso mantener de manera particular la conversación en ese tema, pero cuando nos enfrascábamos en una especie de conversación relajada, repasando las preguntas internacionales del pasado y el presente, al volver al tema del camino que habíamos recorrido durante la guerra, eso es lo que dijo. Cuando escuché sus comentarios, estuve completamente de acuerdo con él, y hoy lo estoy aún más.” (Memoirs of Nikita Kruschev, Comissar: 1918-1945, Volume I, p. 638 y 639).

De modo que con todo lo dicho queda claro que, sin importar qué tanto haya sufrido la Wehrmacht debido a su crónico malestar logístico, la Unión Soviética habría sufrido, como mínimo, lo mismo, en vistas de que en este escenario la masiva ayuda material aliada no existió. Si se quiere argumentar, como se hace tan a menudo, que históricamente “la logística venció a Alemania”, se debe admitir que, de haber peleado sola, “la logística, tarde o temprano, habría vencido a la Unión Soviética”.

EL MITO DE QUE LA URSS TUVIERA UNA PRODUCCION MAYOR DE RECURSOS PARA LA GUERRA:

Como muestra la página 275 del libro “World War II: A Statistical Survey” del autor John Ellis, dependiendo del año y del recurso, Alemania duplicaba, triplicaba o cuadruplicaba a la producción soviética en los recursos cruciales de Carbón, Hierro, Acero y Aluminio, lo cual demuestra que Alemania tenía un potencial mucho mayor para soportar una guerra larga, de desgaste. Hay que dar crédito al mito aclarando que, debido a que Alemania no terminó de movilizar su economía para la guerra total sino hasta 1944, es evidente que su mucha mayor producción de recursos fue “malgastada” en relación al uso que la Unión Soviética le daba a la suya. En esencia, Alemania no dirigió a su economía de guerra todos los recursos que podría haber usado y que superaban con creses a los soviéticos, mientras que la Unión Soviética si lo hizo. Por tanto, es evidente que de nada le sirvió tener y producir más recursos que la URSS, por no invertirlos a tiempo. De todas formas, las cifras dejan en claro que la idea de que “Alemania no tuviera suficientes recursos para ganar en el este ya sea en 1941, 1942 o 1943” es completamente falsa. Recursos para ganar la guerra le sobraban. El error fue no aprovecharlos a tiempo.

Recursos:
Año/Alemania/URSS/Año
Carbón:
1941/402.8/151.4/1941
1942/407.8/75.5/1942
1943/429/93.1/1943
1944/432.8/121.5/1944
1945/50.3/149.3/1945
Hierro:
1941/53.3/24.7/1941
1942/50.6/9.7/1942
1943/56.2/9.3/1943
1944/32.6/11.7/1944
1945/¿?/15.9/1945
Acero:
1941/28.2/17.9/1941
1942/28.7/8.1/1942
1943/30.6/8.5/1943
1944/25.8/10.9/1944
1945/1.4/12.3/1945
Aluminio:
1941/315.6/¿?/1941
1942/420/51.7/1942
1943/432/62.3/1943
1944/470/82.7/1944
1945/¿?/86.3/1945

EL MITO DE LA ESCASEZ DE PETRÓLEO:

La obtención alemana de petróleo era, dependiendo del año, duplicada o triplicada por la soviética. De todas formas, como se vio previamente, la propia URSS no producía suficiente petróleo en relación a su masivo ejército, y por ello era dependiente de sus aliados, en particular de Estados Unidos, para mantener a su gigantesco ejército en funcionamiento.

Adicionalmente, existe el muy propagado y creído mito de que Alemania sufría de una crisis petrolífera, “crisis” entendida como el inevitable agotamiento de sus reservas de petróleo debido a un déficit, y que por lo tanto estaba condenada, tarde o temprano, a quedarse sin este valioso recurso.

Medido como cantidad total disponible para su uso, el petróleo representaba un límite severo a la capacidad bélica alemana y una ventaja grotesca a sus enemigos. A grandes rasgos, los alemanes tenían suficiente petróleo para realizar una sola gran ofensiva por año, mientras que la URSS, casi por si sola, tenía suficiente petróleo para realizar 2 grandes ofensivas por año de forma continua o simultánea, y esto, reitero, sin incluir a sus aliados.

Pero como se observará, no fue un supuesto déficit lo que perjudicó a Alemania, ni tampoco un “límite de tiempo antes de que se quedara sin petróleo para realizar operaciones de gran envergadura”, sino la cantidad total de petróleo existente.

Alemania, entre importaciones de Hungría y sobre todo de Rumania, y su propia producción de petróleo sintético a base de carbón, adquiría siempre más petróleo del que consumía. De hecho, en los años cruciales de la guerra (de 1940 a 1943 incluido) su suministro de petróleo fue mayor que su consumo. Por ejemplo, a fines de 1943, sus reservas de petróleo eran mayores a las que tenían en 1941, sin importar su uso, ya fuere para vehículos de transporte y suministro, tanques o aviones. Por ello, la tan distribuida idea de que “la última oportunidad de Alemania de ganar en el Este (en virtud de su escasez de petróleo) fue en 1942 con la Operación Azul” se desmiente al ver que la producción y reserva de petróleo alemana a fines de 1942 era mayor que la de 1940 y 1941. O, dicho de otra forma, Alemania tenía más petróleo a fines de 1942, que en cualquier año anterior.

Producción y consumo de petróleo (en miles de toneladas métricas) fuente: “World War II: A Statisytical Survey”, p. 275.
Año--Petróleo total a disposición de Alemania--Consumo
1939--8.353--¿?
1940--6.888--5.856
1941--8.485--7.305
1942--8.965--6.483
1943--10.497--6.971
1944--6.504--¿?

El objetivo de Hitler de obtener los yacimientos petrolíferos de Maykop y Grozny (y al cometer el error de extender la operación azul, los de Bakú) no se basaba en la creencia de que no tenía suficiente petróleo para vencer a los soviéticos, sino en que se hallaba en guerra no solo contra la URSS, sino también con Gran Bretaña y Estados Unidos, el mayor productor de petróleo del mundo. Históricamente, era por supuesto vital obtener la mayor cantidad de este recurso valioso para siquiera perdurar en la guerra, y privar al enemigo del mismo para llevar a su colapso económico, en este caso a la Unión Soviética. Pero en este texto se trata la idea de que Alemania no se hallaba en guerra contra Estados Unidos, e históricamente, nunca hubo ninguna crisis de petróleo sino hasta mediados y fines de 1944, cuando la masiva campaña aérea aliada destruyó sus plantas de petróleo sintético y la Unión Soviética ocupó los yacimientos petrolíferos de Ploiesti, en Rumania.

Otro mito relacionado con el petróleo es que la mayoría de este recurso le era importado desde Rumania, cuando en realidad su producción sintética proveía el doble que las importaciones de su aliado.

EL MITO DE LAS INFINITAS RESERVAS RUSAS:

La población de la Unión Soviética solamente duplicaba a la alemana, que era de 86 millones (la soviética siendo de 167 a 170 millones), a menos que incluyamos a los aliados alemanes cuyo esfuerzo bélico haya sido enteramente usado en el frente oriental, como Hungría y Rumania, en cuyo caso ya ni si quiera duplica la población del eje. Téngase en cuenta también que, tras la operación Barbarroja, la diferencia entre ambas poblaciones se redujo drásticamente, la Unión Soviética perdiendo a cerca del 40% de su población por quedar bajo ocupación alemana. ¿Y por qué dije “solamente duplicaba”? Porque eso significaba que, a lo sumo, la Unión podía darse el lujo de perder 2 soviéticos por cada alemán, o de lo contrario estaba condenada a quedarse sin soldados antes que Alemania, a menos que la guerra se desarrollara enteramente a favor de la Unión Soviética. Y precisamente por eso esa ventaja era temporal, porque a lo largo y ancho de toda la guerra, sin importar la ventaja material y numérica de los soviéticos, sin importar si hablamos de una derrota o una victoria, éstos siempre terminaban perdiendo mucho más del doble de tropas, a menudo el cuádruple, lo que significaba que, combinado con su inferioridad productiva en la gran mayoría de recursos esenciales, en una guerra prolongada el tiempo estaba contra ellos, no contra Alemania. Como muestra el ensayo adjunto al final de este sector, el número total de bajas militares del eje en el este, es decir alemanas, húngaras, rumanas, italianas, finesas y eslovacas (lo que incluye bajas permanentes como Muertos En Combate, Desaparecidos En Combate, Prisioneros De Guerra y No aptos para servicio militar, pero también bajas temporales, como Heridos en Combate) es de alrededor de 7.240.551. En el caso soviético, también incluyendo todo tipo de bajas militares, es de 32.878.869. Es decir, la Unión Soviética perdió cinco veces la cifra del eje o, lo que es lo mismo, tuvo el cuádruple de bajas que las fuerzas del eje. Esto a pesar de, dependiendo del año, duplicar o triplicar numéricamente al ejército del eje. No importa la tasa de intercambio exacta entre bajas porque con el uso de cualquier fuente, es evidente que perdían más de lo que su ventaja numérica les permitía, lo que demuestra que la ventaja numérica era insostenible a lo largo del tiempo.

La fuente para las bajas es del historiador Nigel Askey, tomadas de su ensayo del 31 de Octubre de 2017 (página 5):
http://www.operationbarbarossa.net/wp-c ... tation.pdf

Para aquel que dude de la capacidad de Alemania de mantener a largo plazo esa tasa de intercambio extremadamente favorecedora:

Véase el año 1945 histórico, año en que ésta estaba condenada a la derrota no parcial sino total, con su industria petrolífera ya arruinada por la campaña aérea y ocupación soviética de Rumania, luchando en 3 frentes, en cada uno de los cuales superada en número de hombres y equipo. Y aun a pesar de semejantes circunstancias, le causó más del doble de bajas a los soviéticos (casi un millón de bajas alemanas por alrededor de 2.800.000 soviéticas). Es decir, la eficacia alemana por sobre la soviética se mantuvo incluso en el último año de guerra y bajo semejantes presiones insostenibles. Ahora imaginemos, en virtud del escenario que propongo, que la industria petrolera sigue en crecimiento, que la campaña aérea nunca existió, que nunca se desvió recursos para luchar en África del norte, ni en la Batalla del Atlántico, ni para contener el nuevo frente italiano, ni más tarde el francés. La imagen habla por sí sola: Ese 1945, asumiendo que la Unión Soviética no hubiere entrado en negociaciones serias de paz, o no hubiere colapsado económica y militarmente hasta ese año, hubiere sido radicalmente distinto, y en particular el intercambio de bajas entre ambos bandos habría sido evidentemente aún más favorecedor para los alemanes. En otras palabras, Alemania sí podía mantener a largo plazo esa tasa de intercambio. De hecho, no existe en el frente oriental alguna campaña, operación o batalla (de importancia), perdida o ganada, en que los soviéticos no hayan perdido más del doble de hombres y equipamiento.

LA RELEVANCIA DE NUEVOS FRENTES: El fin de la ventaja alemana en el este

Para discernir la importancia crucial de nuevos frentes de guerra, basta con reconocer que, en una guerra prolongada contra la URSS, el tiempo iba en contra de esta última hasta Mayo de 1943, cuando por la expulsión de los alemanes de África en la fecha citada Hitler se ve forzado a enviar más refuerzos a los Balcanes e Italia, lo que produce que Alemania nunca vuelve a recuperar la iniciativa en el este tras la derrota operacional (aunque no táctica) en la batalla de Kursk (que fracasó precisamente por esa división de recursos existente desde 1940 y crecientemente peor desde esa fecha en adelante). No es casualidad que la iniciativa estratégica, y con ella toda posibilidad de derrotar a la Unión Soviética, se haya perdido de forma permanente justo cuando la amenaza de un segundo frente se volvió patente tras la liberación aliada de África. De hecho, el porcentaje de tropas de las fuerzas armadas alemanas en el frente oriental se redujo de un 80% del total en 1941 y 1942, a un 63% en 1943, y a un 62% en 1944, año en el que el porcentaje del total de tanques en el frente oriental se redujo de 80-90% a un 50%, lo que da una buena impresión de los enormes recursos que se tenía que desviar para contener a los aliados en los frentes italiano y francés.

La idea de que el Ejército Rojo haya diezmado a la Wehrmacht a lo largo de la guerra sencillamente no es cierta, al menos hasta la fecha mencionada. A pesar de la derrota alemana en la batalla de Stalingrado, en Julio de 1943 el ejército alemán estaba más y mejor equipado que el de 1941 debido sencillamente al desarrollo que la tecnología militar había conseguido durante la guerra, y a que Alemania aumentó su producción militar. El número de su ejército se hallaba en su zénit (si se incluye a las tropas de sus aliados) y su eficacia, aunque evidentemente reducida en comparación con la de años anteriores, la pérdida del 6º ejército siendo un ejemplo excelente al respecto, seguía resultando evidentemente superior a la de su enemigo por el radio de bajas. Su producción de recursos esenciales para la guerra, así como su economía, seguían superando ampliamente a la soviética, y la movilización económica para la guerra total ya estaba finalmente dando sus primeros pasos. La inmensa mayoría del territorio ocupado tras la Operación Barbarroja (el área más industrializada y rica en recursos humanos y naturales de la URSS) seguía en manos alemanas. Por lo tanto, afirmar que, en ese año, en el este, la probable ganadora sería, eventualmente, la Unión Soviética, no es preciso, a menos que esto sea dicho teniendo en cuenta a todo el teatro de operaciones europeo, algo que en este escenario de uno contra uno no existe. Hablando sólo del este, es recién tras Mayo-Julio de ese año que, ante la obvia división de recursos materiales y humanos, la wehrmacht comienza genuinamente a debilitarse en el frente oriental, cediendo de manera permanente la iniciativa estratégica. Por tanto, hasta ese año, y esos meses, las posibilidades de Alemania de ganar la guerra en el este seguían siendo mayores que las soviéticas, ya no tanto como a fines de 1941 o el verano de 1942, y sobra reiterar que nada en la guerra tiene certeza, pero la guerra en el este seguía a su favor.

EL MITO DE QUE ALEMANIA SE ESTUVIESE QUEDANDO SIN SOLDADOS:

En ningún año estuvo Alemania ni remotamente cerca de quedarse sin reservas, como muestra Mark Harrison en “The Economics of World War II”. Se suele citar como evidencia que Alemania, ya desde 1942, hacia cada vez más uso de las tropas de sus aliados Rumania y Hungría, lo que señalan como evidencia de que Alemania se estaba quedando sin hombres. Pero hay que recordar que, a diferencia de la Unión, Alemania empezó a movilizarse de manera total para la guerra recién en 1944, cuando los soviéticos habían hecho lo propio desde Junio de 1941. Es evidente que en 1942 Alemania aun no contaba, por no estar completamente movilizada, con el verdadero número de tropas que podían uniformar y llevar a la guerra, y de ahí que decidieran utilizar más tropas de sus aliados. ¿Cómo puede uno llegar a esta conclusión? Pues si sabemos que Alemania producía más recursos vitales para la guerra que la URSS (más allá de no aprovecharlos), y que de hecho su economía era más grande, ésta es la única conclusión lógica a la que se puede llegar.

También se cita como evidencia que hacia el final de la guerra reclutaban niños, mujeres y ancianos en las milicias “Volksturms”, pero esto no es un síntoma de escasez de hombres, es un síntoma, precisamente, de la práctica de la guerra total. De ser un síntoma de escasez de hombres, tendríamos que concluir, absurdamente, que la Unión Soviética estaba quedándose sin hombres ya a fines de 1941, cuando en ocasión de la batalla de Moscú reclutaron ancianos y niños, o en su defecto en Diciembre de 1942, cuando comenzaron oficialmente a reclutar mujeres. Esas conclusiones son ridículas, y por tanto también lo es que Alemania se estuviera quedando sin reservas militares.

Conclusión:

Nada en un escenario hipotético es certero, pero de acuerdo a las cifras, Alemania estaba mucho mejor posicionada que la URSS para ganar una guerra prolongada en el este, al menos hasta mediados de 1943. La razón por la cual no lo hizo, es que se trató de una guerra mundial, con múltiples enemigos, y múltiples frentes.

Bibliografía usada en este ensayo:
-“The Impact of World War II on the Soviet Union” de Susan Linz.
-“Russia’s Life-Saver, Lend Lease Aid to the USSR in World War II” de Boris Sokolov.
-“Deathride: Hitler vs. Stalin” de John Mosier.
-Entrevista confidencial de Konstantin Simonov a Georgy Zhukov en 1963.
- “Memoirs of Nikita Kruschev, Comissar: 1918-1945” de Nikita Kruschev.
-“Wolrd War Two: A Statistical Survey” de John Ellis.
-Ensayo del 31 de Octubre de 1917, de Nigel Askey.
-“The Economics of World War 2” de Mark Harrison.
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Ozymandias
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Re: La Derrota Evadida

Mensaje por Ozymandias »

¡Hola! Vengo desde tu otro post (jopé, menudo paseo me estoy dando por el foro jaja) y... bueno, en primer lugar me quito el sombrero por tu magistral post. Has dado muchísima información que yo desconocía, y la verdad que me has convencido :P . Sólo me surge una pregunta. En este caso, ¿cuál crees que sería el escenario después de la guerra? ¿Entrarían en una especie de Guerra fría con Reino Unido? Si la URSS siguiese sobreviviendo, más allá de los Urales, ¿cuál sería la situación con ellos? ¿Sería Alemania capaz de gestionar todos los pueblos europeos, o acabaría cayendo por levantamientos y guerras civiles? (Yo personalmente me inclino por esta última). Te escucho, que seguro que tienes una opinión al respecto.
SMEK
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Re: La Derrota Evadida

Mensaje por SMEK »

¡Me alegra que el ensayo te haya gustado y resultado convincente!

Respondiendo a tus preguntas:

-Obviamente todo esto es pura hipótesis, pero teniendo en cuenta la forma en que Alemania manejaba a las naciones ocupadas en el este (de manera innecesariamente y contraproducentemente brutal) el imperio alemán sobre tan basto territorio no habría durado mucho tiempo. Los movimientos de resistencia partisanos existentes durante la guerra habrían continuado existiendo tras finalizar la guerra contra la URSS, y jamás hubieran sido completamente neutralizados. Si suponemos que todo sale de manera perfecta para Alemania (la URSS se rinde o desintegra, Gran Bretaña firma la paz, Estados Unidos nunca entra en la guerra) su imperio podría haber durado bastante, pero eventualmente habría colapsado por conflictos internos, sobre todo tras la muerte de Hitler.

-Si la Unión Soviética no se desintegraba tras su evidente derrota y sobrevivía más allá de los Urales e incluso continuaba con la guerra (cosa que tengo admitir me resulta muy difícil de imaginar), no creo que hubiera sido necesario para Alemania ir tan lejos o continuar de forma activa con la guerra, porque a tal punto la Unión Soviética no hubiera representado una amenaza militar seria para Alemania (recuérdese, obviamente, que todo esto está enmarcado en el escenario de 1-vs-1), pues al perder su porción europea, por lejos la más desarrollada y poblada de la Unión, no habría tenido recursos suficientes (ni naturales, ni humanos) para causar algún daño severo a los germanos. Creo que con el tiempo la Unión se hubiera disgregado (al fin y al cabo, a tales extremos la Unión ya no contaría con más de la mitad de sus repúblicas (Bielorrusia, Moldavia, Ucrania, Letonia, Estonia, Lituania, Georgia, Azerbaiyán, Armenia y la porción europea de Rusia).

-Si Gran Bretaña firma la paz tras la caída de la Unión Soviética, claramente puedo ver una guerra fría entre ambos imperios (a esas alturas, Gran Bretaña controlaba casi el 25% del planeta tierra y dominaba los mares, y Alemania habría controlado esencialmente toda Europa), y a diferencia de lo que ocurrió históricamente, Gran Bretaña se habría aferrado con uñas y dientes a sus territorios coloniales (precisamente por la guerra fría, que implicaba una amenaza seria y constante por parte del imperio alemán a la seguridad británica). Hitler siempre quiso la paz con Gran Bretaña (se la propuso dos veces de manera oficial, en Octubre de 1939 y Julio de 1940, y varias veces en secreto) y Gran Bretaña (afortunadamente) se negó tercamente a darse por vencida aunque Hitler fuera hasta ese momento el claro ganador de la contienda. Así que puedo ver a Hitler proponiendo otra vez una paz (con términos claramente favorables a Alemania, evidentemente) en lugar de continuar con planes de invasión a la isla.

Pero aclaro de nuevo que todo esto es pura hipótesis. Puede que tenga razón, así como puede que nada de lo que escribí arriba hubiese ocurrido así.

Me encanta tu nombre de usuario. Es de Watchmen, ¿Cierto?
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Ozymandias
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Re: La Derrota Evadida

Mensaje por Ozymandias »

¡Hola! Contesto uno por uno a tus comentarios.

- Sí, yo también considero que, incluso si Alemania ganase la guerra de manera perfecta y todo fuese bien para ella, la propia lógica racista del nazismo la hubiera llevado a su destrucción. No sólo tendría problemas con los respectivos partisanos de su país, sino que medidas como su expansionismo, o el planeado genocidio de diversos pueblos eslavos habrían acabado siendo la fuente de innumerables levantamientos y guerras civiles dentro del territorio nazi. Al final, incluso los gobiernos leales al Reich se habrían rebelado, simplemente por seguir existiendo. En mi opinión, podría mantener su poder si, como hizo durante la guerra, hubiese mantenido una estructura basada en gobiernos leales, o directamente títeres, pero claro, eso ya sería pedirles a los nazis que dejen de ser nazis.

- Yo personalmente sí creo que la URSS podría haber sobrevivido al menos hasta 1953, porque desde luego que no veo a Stalin simplemente rindiéndose. Eso sí, después de eso... No sé bien. Imagino que si Alemania gana la guerra Japón también ganaría, o al menos le iría mejor, por lo que no creo que los soviéticos pudiesen buscar ayuda tampoco en la China de Mao, única manera que veo de sobrevivir. Al final, me parece que su destino sería o dividirse, o ser eventualmente invadidos por Alemania/Japón, dado que, por mucho que no representase una amenaza, estos no iban a permitir que un estado socialista siguiese existiendo.

- La cuestión de Gran Bretaña la veo mucho más interesante, por varias razones. En primer lugar, concuerdo en la idea de una Guerra Fría entre Alemania y Reino Unido, por diversas razones. Del mismo modo, también me parece lógico que, para no perder su poder, el RU se volviese mucho más férreo con sus colonias, y tal vez incluso con otros territorios más autónomos como Canadá o Australia. Pero aquí no me parece que la cuestión sea Alemania, sino Japón. Ya desde el comienzo de la guerra, Japón oteaba India como posible objetivo a conquistar, y eso entraba directamente con conflicto con RU, que la consideraba la joya de la corona del Imperio Británico. Así que casi veo más un conflicto entre RU y Japón por la India, con Alemania de espectador, o tal vez incluso de participante ambiguo, apoyando a un bando u otro, o incluso a ambos según le convenga.

Por cierto, cuestión importante al hablar de RU. Durante la 2ª GM, a pesar de que Irlanda se mantuviera neutral, muchos políticos nacionalistas propusieron acercarse a Alemania, dado que esta les había prometido que, de ganar la guerra, haría lo posible por la unificación de Irlanda. No sé hasta que punto pensaba Hitler mantener sus promesas, pero habría sido algo interesante de ver.
Y por cierto, mi nombre no es de Watchmen, sino de un poema de Percy Bysshe Shelley de 1818, de donde creo que toma el nombre el personaje. Dice así.

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Re: La Derrota Evadida

Mensaje por SMEK »

Ya veo. Diferimos en dos temas: la duración de una Unión Soviética más allá de los Urales. Aunque Stalin jamás se hubiese rendido, habría que ver si a esas alturas Stalin seguía en el poder. Yo creo que hubiese sido "derrocado" para entonces.

Una guerra fría entre GB y Alemania me parece más creíble porque a diferencia de Japón, la amenaza alemana estaba a unos pocos kilómetros de distancia. Es decir, hubiera sido una amenaza mucho mayor. India era considerada la posesión colonial más valiosa pero, valga la obviedad, la isla de Gran Bretaña era más valiosa.

Ahí googlé el poema. Resulta que el cómic "Watchmen" tomó el nombre del poema para dárselo a uno de sus personajes.
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