En una fría mañana de diciembre de 1941, una patrulla de soldados alemanes se encontraba recorriendo los bosques de los alrededores de una ciudad noruega ocupada por los nazis. De pronto, se encontraron con un pequeño paracaídas enganchado a las ramas de un árbol al final del cual pendía una caja no demasiado grande que se balanceaba al compás de la fría brisa invernal. Los soldados no tardaron en descolgarla y examinar su contenido. Dentro, bajo una gruesa capa de grasa, se encontraban las piezas desmontadas de un arma de aspecto tosco junto con diez cargadores llenos de munición. Los aviones de la R.A.F. habían estado sobrevolando la zona durante la noche, pero por si acaso quedaba alguna duda del origen de la caja, en el cuerpo del arma estaban impresas las palabras "STEN, MK II”.
De vuelta en el cuartel, los soldados sacaron las piezas de la caja y comenzaron su montaje. Se trataba de cuatro piezas: Una culata de metal, un cañón de 9mm, un crudo cuerpo central con la boca de alimentación y un cargador. No había hecho falta ni tan siquiera leer el pequeño panfleto con las instrucciones de montaje que acompañaba al arma. Tras probarla, se dieron cuenta que disparaba más rápido que su MP-40, unos 550 proyectiles por minuto, y que era notablemente precisa. Menos de 24 horas después, el comisario del Reich para Noruega, Josef Tervoben, radiaba un decreto por el que se condenaba a muerte a quien fuese sorprendido con un subfusil Sten en sus manos. Los alemanes eran conscientes por primera vez que los británicos habían comenzado a armar a los pueblos de la Europa ocupada para que pudiesen resistir hasta que los aliados fuesen capaces de invadir el continente. ¿De dónde había salido el arma? ¿Cuál fue su origen y su desarrollo?
El ejército británico no contaba con ningún subfusil propio al comienzo de la guerra. Ya desde 1938 el mando había evaluado un gran número de ellos, aunque al final se había decidió que el dinero para comprar armas se debía gastar en otro tipo de armamento más vital. Así pues, cuando estalló la guerra el gobierno de su majestad se vio forzado a adquirir subfusiles en el extranjero. Durante las pruebas de la preguerra, el consejo de compra de armamento había determinado que el mejor subfusil de los analizados era el Suomi finlandés, pero no podían adquirirlos ya que los patriotas finlandeses se encontraban en ese momento luchando contra el invasor soviético. De ese modo, se vieron forzados a adquirir de los EE.UU. algunas cantidades no muy numerosas de subfusiles Thompson, de los que no tenían tan buena opinión desde el punto de vista técnico.
En 1940, tras la retirada de Dunkerque, la búsqueda de un subfusil se convirtió en una prioridad vital, ya que estaba claro que el siguiente objetivo de la maquinaria de guerra alemana serían las islas británicas. En agosto de 1940, sin tiempo para diseñar y evaluar un arma propia, decidieron construir una copia del subfusil alemán MP-28 Bergmann e hicieron un pedido urgente a la industria británica para fabricar 50,000 unidades, a la vez que se hacía un pedido de varios millones de cartuchos del calibre 9mm. El 28 de noviembre de 1940 se probaron los primeros prototipos del subfusil que sería conocido como el Lanchester, nombre del diseñador del arma, George Herbert Lanchester, empleado de la Sterling Armaments Company.
Sin embargo, la situación en enero de 1941 había cambiado. La amenaza de una invasión alemana, aunque no del todo descartada, se había disipado considerablemente tras la victoria inglesa en la Batalla de Inglaterra. El Ministerio de la Guerra había solicitado a la Royal Small Arms Factory de Enfield el diseño y la fabricación de un subfusil lo suficientemente robusto, ligero, fácil y barato de fabricar y que tuviese una cadencia de fuego similar al Thompson para equipar a sus tropas. Dos hombres pertenecientes al departamento de diseño no habían perdido el tiempo y habían dibujado los planos de un arma que respondía perfectamente a esos parámetros. Se trataba de un modelo del Mayor Reginald Vernon Shepherd, Inspector de armamento del Royal Arsenal de Woolwich, y el diseñador Harold John Turpin, denominado N.O.T. 40/1. El arma se presentó al alto mando y tras su fabricación como prototipo, pasó varias demostraciones ante los militares en el Small Arms Factory en Enfield Lock el 10 de enero de 1941 y luego el 21 de ese mismo mes, tras lo cual se pidió al Ministerio de la Guerra que tomase una rápida decisión sobre si era conveniente seguir fabricando el subfusil Lanchester o si se deberían destinar todos los recursos a la fabricación masiva de esta nueva arma.
El N.O.T. 40/1 fue nuevamente sometido a varias pruebas a finales de enero de 1941 en las que se dispararon unos 5.400 cartuchos sin que el arma se rompiese ni dejase de funcionar. Tras el resultado satisfactorio de dichas pruebas, se dieron instrucciones para comenzar las operaciones que permitieran construir el subfusil a la mayor brevedad posible. Las primeras unidades salieron de la fábrica en junio de 1941, con la denominación oficial de “Machine Carbine, Sten, Mk. I”. El nombre del arma era al parecer un acrónimo que derivaba de las siglas de sus diseñadores y del lugar donde se encontraba la Royal Small Arms Factory: Sheperd, Turpin y ENfield, aunque algunas fuentes cambian estas dos últimas como provenientes de la palabra ENgland.
El Sten se podía construir con una mínima cantidad de operaciones de maquinaria, siendo la mayoría de sus componentes metal prensado y soldadura. La producción de piezas, por tanto, podía efectuarse sin problemas en pequeños talleres y luego ensamblarse en la fábrica de Enfield. Las versiones más baratas de este subfusil contaban con 47 piezas y requerían únicamente cinco horas de trabajo para fabricarse.
El subfusil Sten era extremadamente ligero y fácil de transportar, aunque la configuración del cargador lo hacía un tanto incómodo de disparar. El operador tendía a sujetar el subfusil por el cargador, lo que propiciaba que la alimentación de los cargadores se interrumpiese y la acción se detuviese. La forma correcta de sujetarlo, con la mano izquierda en la chaqueta perforada del cañón, corrigió el problema. Inicialmente, el Sten se distribuyó entre aquellas tropas blindadas, mensajeros y todos aquellos soldados que no necesitaban un arma larga para combatir. No obstante, el arma terminó repartiéndose entre los batallones de infantería, sobre todo a sargentos de compañías y comandantes de secciones de infantería.
El Sten se podía disparar desde la cintura o encarado al hombro, de forma tradicional. Su alcance efectivo era muy corto. Contaba con dos miras de construcción muy básica y que prácticamente no servían para apuntar, lo que por otra parte no era muy importante en un arma con tan corto alcance efectivo. Su pequeño tamaño, simplicidad y facilidad de despiece lo convirtieron en el arma favorita de los grupos de resistencia del continente. Además, utilizaba munición de 9mm, por lo que era compatible con la del subfusil alemán MP-40. Estos grupos aprendieron a manejarla y repararla de manera bastante eficiente, llegando a modificarla e incluso se atrevieron a fabricar clones del arma, como ocurrió con los resistentes polacos.
El subfusil Sten se retiró del servicio activo en los años 60, siendo reemplazado por el Sterling. Tras la guerra, se utilizó extensivamente por parte de los partisanos judíos durante la guerra de independencia. Al igual que otras armas de la Segunda Guerra Mundial, combatió en prácticamente todas las guerras de la segunda mitad del siglo XX en manos de muy diversos grupos. Algunas partidas de estas armas cayeron asimismo en manos de los guerrilleros españoles que se lanzaron la monte tras la victoria de Franco en la Guerra Civil. Estos resistentes, denominados Maquis, utilizaron las abundantes partidas del Sten procedentes de los guerrilleros españoles que habían combatido en Francia durante la Segunda Guerra Mundial. Incluso se han capturado unidades en manos de la banda terrorista ETA.
Subfusil Sten
La primera unidad del primer modelo de Sten Mk. I, denominado el T-40/1, se hizo a mano en 1940 y recibió el número de serie 1. Este arma se exhibe hoy en día en la Escuela de Infantería y Armas Ligeras del Ejército Británico (British Army's Infantry and Small Arms School) de Warminster, Wiltshire, Inglaterra. El Mk. I era un arma simple, que funcionaba mediante un sistema de retroceso usando un cerrojo pasado con un muelle helicoidal para lograr el automatismo. A pesar de este sistema tan simple, el arma contaba con algunos refinamientos quizás un tanto absurdos, como una muy tosca bocacha apagallamas, un absurdo asidero que se podía plegar bajo el cañón cuando no se usaba y una cubierta de madera que cubría el cajón de mecanismos del arma. Podía hacer fuego tanto tiro a tiro como en ráfagas, mediante una palanca selectora en forma de botón de recorrido circular situada encima del gatillo.
Como medida de seguridad, contaba con un rebaje en el canal para alojar e inmovilizar la palanca de montar. Se alimentaba mediante cargadores de petaca de 32 proyectiles. La producción del modelo Mk. I se adjudicó en su totalidad a la empresa Singer Manufacturing Co. (empresa dedicada a la fabricación de máquinas de coser), que construyó unas 100.000 unidades del arma. Es una de las más difíciles de encontrar, ya que la mayoría fueron destruidas por considerarse obsoletas una vez comenzada la producción del modelo Mk. II y posteriores.
Se eliminó la bocacha apagallamas y la cubierta de madera que cubría el cajón de mecanismos, sustituyéndose por metal prensado. Asimismo se descartó el asidero delantero. Destacaba la unión del alojamiento del cargador a un manguito articulado en un muelle, de tal manera que en condiciones climatológicas adversas podía girarse 90 grados, actuando como una cubierta protectora de la suciedad. El cañón, que se podía sustituir rápidamente, sobresalía de la chaqueta metálica de refrigeración unos 8 centímetros. Por último, se modificó la posición del rebaje para colocar la palanca de montar a la parte superior del canal, lo que suponía un movimiento más natural que moverlo hacia abajo.
Las primeras armas de prueba se fabricaron entre el 29 de junio y el 1 de julio de 1941. Tras su aprobación, el arma se comenzó a fabricar de manera inmediata y enseguida se comenzaron a repartir entre los movimientos de resistencia europeos, construyéndose un total de unas 2.600.000 unidades, repartidas entre varias fábricas: La de Theale construyó unas 95.000 unidades, BSA hizo 400.000 y Long Branch de Ontario, Canadá unas 133.000, entre otras.
Se trató de una versión experimental para tropas aerotransportadas que nunca se fabricó.
Su producción comenzó en 1944. Se trata quizás de la versión más elaborada del arma. Contaba con un culatín de madera y un pistolete. Las miras se sustituyeron por otras parecidas a las del fusil Enfield Nº4. Esta versión se utilizó en Normandía y de manera extensiva en la operación Market Garden en manos de las tropas aerotransportadas, sustituyendo paulatinamente a los otros modelos.
La primera vez que el subfusil Sten entró en combate fue durante el raid de Dieppe en agosto de 1942. Los soldados canadienses que recibieron el arma en las semanas previas a la operación, tuvieron que realizar un ingente trabajo de ajustes y pruebas para lograr que las armas estuviesen preparadas. Tras la cancelación inicial de la operación en Julio, los subfusiles les fueron retirados. Cuando por fin se decidió que el raid seguiría adelante, las tropas recibieron la notificación de que el ataque tendría lugar al día siguiente y recibieron, para su enorme enfado, un cargamento de Sten nuevas, engrasadas en las cajas de la fábrica.
El Sten no se utilizó en Italia, probablemente para no empeorar los problemas de suministro, ya que se estaban enviando grandes cantidades de cartuchos de calibre .45 ACP para los subfusiles Thompson y las pistolas 1911, por lo que las armas que utilizaban munición de 9mm suponían una carga adicional en el ya saturado sistema de suministro de pertrechos al frente.
La Mk II y Mk III eran armas un tanto inseguras, que se disparaban si caían al suelo con fuerza cuando estaban cargadas. Algunas disparaban a ráfagas a pesar de tener el selector colocado en modo tiro a tiro y viceversa. Aunque los soldados vieron que el arma cumplía la función para la que se había diseñado, nunca tuvieron excesiva simpatía por ella, sobre todo debido a su aspecto tosco. Entre los sobrenombres con los que se le conocía estaban “el aborto del fontanero”, "La pesadilla del fontanero" y el "tommy gun de hojalata".
En la primavera de 1944 se abordó el problema de los disparos accidentales del arma, aplicando una solución que pasaba por practicar un agujero en el cuerpo del arma y sustituir las palancas de montar por las del modelo Mk V. De esta manera, la palanca podía empujarse hacia adentro cuando se encontraba en posición extendida de tal forma que el cerrojo quedaba fijado al arma y no podía moverse y por tanto dispararse accidentalmente.
Otro problema era su tendencia a las detenciones y a los encasquillamientos. Aunque muchas de las historias de estos fallos en momentos clave son apócrifas, hay una que fue pública y notoria. Tuvo lugar durante el asesinato de Reinhard Heydrich el 27 de Mayo de 1942 en la llamada Operación Antropoide, cuando el oficial eslovaco Jozef Gab?ík apuntó a quemarropa con un subfusil Sten Mk II hacia Heydrich, con tan mala suerte que el arma se encasquilló y no pudo disparar. Otro miembro del equipo, Jan Kubiš, que estaba al quite, lanzó una granada al coche, hiriendo mortalmente a Heydrich.
Las detenciones solían ocurrir por varios motivos, como el deficiente mantenimiento y limpieza del arma, debido a la acumulación de carbonilla y suciedad en el carril del cerrojo y la recamara. Otro motivo frecuente de las detenciones era la forma errónea de manipular el arma durante el disparo. El arma se solía sujetar de manera incorrecta al disparar, sujetando el cargador con una mano, lo que gastaba la boca de alimentación e impedía que los proyectiles fluyeran libremente hacia la recamara. Otro problema era el mismo cargador, una copia del MP-40 alemán, de manera que el arma se pudiese usar con los cargadores alemanes capturados. Los cargadores del Sten alojaban los proyectiles en una doble fila o tresbolillo. Otras armas que utilizaban este sistema permitían la alimentación desde ambas filas, mientras que en las de la MP-40 y la Sten las filas confluían en una sola cuando llegaban a la boca de alimentación del arma. Cualquier partícula de suciedad podía causar un mal funcionamiento.
Por otro lado, las paredes de los labios de los cargadores se solían deformar debido a la presión que ejercían los proyectiles alojados y a la forma errónea de sujetar el arma. Si los labios perdían el ángulo correcto ( 8 grados) comenzaban a fallar y a detener la alimentación de proyectiles. Los soldados pronto idearon una solución improvisada que consistía en alojar un número inferior de proyectiles en el cargador para que los labios de la boca del cargador sufriesen menos presión, generalmente 28 balas. Asimismo, se diseñó un aparato para cargar de munición los cargadores, ya que al hacerlo a mano era habitual no alinear los proyectiles correctamente, lo que también influía en los problemas de alimentación del arma.
Mk.I
Calibre: 9 mm Parabellum
Longitud: 900 mm
Longitud del cañón: ?
Velocidad de disparo: 550 dpm
Capacidad del cargador: 32 proyectiles
Alcance efectivo: 150-200 mts
Mk.II
Calibre: 9 mm Parabellum
Peso: 3,26 kg
Longitud: 895 mm
Longitud del cañón: 196 mm
Velocidad de disparo: 550 dpm
Capacidad del cargador: 32 proyectiles
Alcance efectivo: 150-200 mts
Mk.III
Calibre: 9 mm Parabellum
Peso: 3,18 kg
Longitud: 762 mm
Longitud del cañón: 196 mm
Velocidad de disparo: 550 dpm
Capacidad del cargador: 32 proyectiles
Alcance efectivo: 150-200 mts
Mk.V
Calibre: 9 mm Parabellum
Peso: 3,86 kg
Longitud: 762 mm
Longitud del cañón: 196 mm
Velocidad de disparo: 550 dpm
Capacidad del cargador: 32 proyectiles
Alcance efectivo: 150-200 mts
Fabricantes:
Singer Manufacturing Co.
Royal Small Arms Factory, Enfield
BSA (Birmingham Small Arms, Co.)
Royal Ordnance Factory Fazakerley
Royal Ordnance Factory Maltby
Royal Ordnance Factory Theale
Lines Brothers Ltd
Long Branch, Canada
El despiece del subfusil Sten es muy sencillo, pudiendo llevarse a cabo de manera casi instintiva, sin necesidad de manuales ni instrucciones especiales, tal y como se indica a continuación:
Fotos Históricas
En esta foto, un oficial alemán inspecciona una Sten, sin duda pensando como es posible que un arma tan tosca y fea tuviese haciendo tanto daño a su retaguardia en manos de la resistencia.
En España, el subfusil Sten fue utilizado por el Maquis. En la siguiente foto se observa el cuerpo del famoso guerrillero "Juanín", caído el 24 de abril de 1957 a la entrada de Vega de Liébana, Cantabria tras un enfrentamiento con la Guardia Civil. A su lado, un Sten Mk.II.
El Sten fue utilizado, aunque de manera marginal, por algunas tropas estadounidenses durante la Segunda Guerra Mundial. Es el caso del 777º Batallón de Artillería de Campo Negro, en una foto tomada durante la batalla de las Ardenas.
Durante la guerra de Vietnam, tropas especiales de los EE.UU. también utilizaron la versión del Sten con supresor de sonido:
Para finalizar, les adjunto una serie de fotos del subfusil Sten Mk.II de mi colección. Este ejemplar fue vendido al ejército finlandés tras la guerra.
Fuentes / Para saber más:
- Infantry weapons of World War II, por Ian V. Hogg, Bison Books, LTD, Londres, 1987
- World War II blog
- Perth Regiment
- Pegasus Archives
- Paisajes de la guerrilla
- Airborne Assault Paradata
- Gunpics.net
- Weapons online forum
- Britishpathe
- History of War
- The Sten Gun
- Imperial War Museum